Había una vez una ranita que vivía en un pozo, tenía días buenos y tenía días malos y tenía su lista de deseos como todas las ranas tienen. Y un día dando un paseo, se encontró con otra rana, era más grande que ella, era tranquila, agradable y muy bien educada. Al encontrarse, la rana más pequeña dijo: yo vivo en ese pozo ¿por qué no vienes?, te invitare a beber algo y charlaremos. La otra rana acepto, asique bajaron y se pusieron a nadar, la rana del pozo estaba muy orgullosa de sus posesiones de su pozo etc., y comenzaron a charlar, la ranita preguntó: ¿de dónde eres?, la rana más grande le contestó: vivo en el lago grande. La rana pequeña preguntó ¿qué es un lago? y la otra respondió: es un sitio enorme muy extenso asique la ranita se levantó de su sitio y señalo un pequeño círculo, y luego pregunto: ¿tu lago es así de grande?  La otra rana estaba muy educada, dulce tranquila asique respondió: no es algo mayor, la ranita se rasco la cabeza asombrada y creo otro círculo esta vez fue claramente mayor de nuevo pregunto: ¿es así de grande? Y la respuesta fue: no, es  mucho mayor, y así sucesivamente, Finalmente la ranita marco la circunferencia total de su pozo, a que la rana le respondió: no, es mayor, y la ranita dijo: lo siento pero eso no es posible, no es posible porque no existe ningún lugar mayor que mi pozo, mi pozo es lo mayor no hay ningún lago mayor no hay ninguna extensión de agua mayor. La rana más grande invitó a la ranita a su lago, por supuesto cuando entró en él, se dio cuenta de que era muchísimo mayor y la realidad se hizo evidente.